martes, 11 de agosto de 2009

Èl


Ni riendo, ni llorando, ni gritando ni anhelando… Tal parece que no hay forma… ya no hay forma de que te pueda convencer? No te das una idea de todo lo que yo haría por volverte a ver a ti, una sola vez más.
Saliendo de tu casa, levantándote de tu cama, tomando una taza de chocolate caliente, o aunque sea poderte observar largando una simple sonrisa al atardecer.
Sé que no puedo, me niegas esa posibilidad hace meses. Largos, tediosos, aburridos y monotemáticos meses.
Días y semanas enteras pensando en ti, en tus ojos negros llenos de vida y en el último beso que me diste aquel primer miércoles del mes. Ya no tengo mas inventos ni excusas para aferrarme a cosas que me recuerden tu presencia, ya no tengo el deber de callar tu nombre, o si. Pero en la intimidad de mis sueños rotos, ya no puedo.
No puedo. No hay forma de poder ocultar todo lo que en mí se inunda cada vez que mi alma pronuncia tu nombre, cada vez que en esta tonta cabecita loca se instala la idea de no volverte a ver jamás. Si tan solo pudiera entrar en ese, tu mundo… En realidad, no se que haría.
Solo se que no podría decir mucho, las palabras se me están trabando en el pecho últimamente. (Lo descubrí hace unas semanas junto al río). Creo que mirarte a los ojos me bastaría. Y si, trataría de besarte una vez más. Y seguro me correrías la cara, y te reirías de mí. Y yo? Igualmente te miraría muy estúpidamente; débil, y encontrarías muy frágil mi rostro frente a frente con el tuyo. Y no me importaría todo lo demás, se que no me importaría. Escuche decir que vivir es un acto suicida.
Estar sin ti, sin duda, también lo es.

1 comentario:

  1. Se hizo emoción la inocencia, cuando pego esa sensación.. Quedamos en presencia de la ausencia del dolor...
    es que se hizo emoción la inocencia.

    =)
    Lio

    ResponderEliminar