El día que lo conocí, todavía
llevaba puesto mi delantal del jardín de infantes.
Vino mi papá con la cara iluminada, y me dijo que esa linda canción que estaba sonando en la cocina de mi casa era de un señor que se llamaba Luis Alberto, y me sentó a escuchar Muchacha.
No se como explicar lo que sentí siendo tan chiquita, cuando escuche esa canción.
Así conocí a Spinetta, fue amor a primera vista. ( o a primera oída)
Lloré con él y me abrazó en cada canción, crecí escuchándolo. Aprendí.
Vino mi papá con la cara iluminada, y me dijo que esa linda canción que estaba sonando en la cocina de mi casa era de un señor que se llamaba Luis Alberto, y me sentó a escuchar Muchacha.
No se como explicar lo que sentí siendo tan chiquita, cuando escuche esa canción.
Así conocí a Spinetta, fue amor a primera vista. ( o a primera oída)
Lloré con él y me abrazó en cada canción, crecí escuchándolo. Aprendí.
Le debo mucho.
Hoy siento que me arrancaron
el corazón. El me salvo la vida, y supongo que no fui la única.
La calidez de su poesía va a
quedar siempre dentro mio, hoy es polvo de estrellas y flota en el aire, lo
puedo sentir. Esta ahí, en cada verso, en cada canción suya que escucho cuando
paseo por Belgrano o cuando voy a trabajar; en cada sonrisa de mi viejo cuando escuchamos juntos Artaud.
Luis Alberto vive en mi alma, y en la de
tantos otros que hoy lo lloramos.
Estoy tan triste que no puedo decir ni una palabra, cené en silencio, y corrí a abrazar a mi viejo muy fuerte.
Estoy tan triste que no puedo decir ni una palabra, cené en silencio, y corrí a abrazar a mi viejo muy fuerte.
Gracias Luis Alberto, te amo mucho y para siempre.
GRACIAS por enseñarme a volar entre tanta gente de pie.
Ahora sos partículas de amor flotando en todo el aire que respiro, sos eternamente hermoso.
Sos luz, siempre lo fuiste.
Las almas repudian todo encierro... y ahí está el flaco, sobrevolando nuestras cabezas, siempre un poco más arriba del resto.
ResponderEliminarTan sabio èl, nunca nos va a dejar solos. ♥